Lo único que alcanzé a vislumbrar fue ese gran par de luces que llegaron a centímetros de mi cara, no alcanzé a sentirme asustado:
¿Dónde estoy?- me preguntaba a mi mismo una y otra vez viendo que se acercaba una sombra ante mis ojos. ¿Dónde estoy?- volví a preguntarle a la sombra que cada vez tomaba una rara forma.
Estás en un lugar cierto e incierto a la vez, donde tus sueños ya no lo son, se hacen realidad, pero a la vez no. - dijo con soltura la sombra que ya tenía forma de persona.
¿Cómo es eso?- pregunté- ¿Cómo algo puede ser o no ser a la vez?
Eso, lo responderás tu mismo- agregó apenas había terminado de articular palabra.
¿Estoy muerto? - pregunté desesperadamente a la persona que otra vez volvía a ser una sombra y desaparecía.
¡¿Estoy muerto?!- grité, pero nadie respondió.
Comenzé a caminar por el amplio lugar en el que estaba, era como un gran pasillo iluminado por una tenue luz que parecía salir de las paredes. Pensé en las palabras de la sombra con forma humana que recién había hablado. ¿Cómo puede algo ser y no ser al mismo tiempo?... una y otra vez me preguntaba lo mismo.
Luego de caminar un tanto me di cuenta de algo, este camino no tenía fin, comenzé a buscar alguna ventana o puerta, hasta que encontré una manilla, la giré y abri la puerta:
¿Hay alguien por ahí?- Alguien ahi? alguien ahi? alguien ahi? - se sintió el eco de mi voz que cada vez se apagaba más, en ese momento se acercó otra sombra, esta vez de una mujer, comenzé a sentir que un escalofrío que atravesó mi cuerpo. ¿Habrá sido un efímero sentido de desesperación? vi que la mujer se acercaba a mi, y con una voz que rompió el desgarrador silencio de aquel lugar me dijo lo siguiente:
Busca tu camino, caminante. Busca tu cosecha, ganador. Busca tu salida y sé feliz.
Atónito la miré, pero no articulé palabra alguna. Comenzé a ver como lo que hace unos segundos estaba en frente mío se deshacía, intenté correr, buscar un lugar donde pudiese estar tranquilo, sentí un fuerte grito a lo lejos, alguien me llamaba, no decía mi nombre, pero sabía que me llamaba a mi,cuando no sentí más aquel grito me tranquilicé.
Con un fuerte crack! desperté y me di cuenta donde estaba realmente, un par de enfermeras curaban mis heridas, recordé el accidente, las luces a centímetros de mi cara... todo había sido un sueño, una pesadilla, tal vez los dos a la vez, pero ¿Cómo pueden ser dos cosas opuestas a la vez?.
-Claudio-
jueves, 26 de julio de 2007
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1 comentario:
Buen escrito..Buen tema, da para alargar y escribir un libro.
El desarrollo de la acción fue un poco rauda pero ya sabes lo ke opino..n___n..
Wuenisimo loko, sigue escribiendo..=D
Pabloko
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